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🍽️RESEÑA🍽️
- El millor bar de tapes de tot Burgos tant per la qualitat de la cuina com per l'atenció del personal.
- Sempre que anem acostumem a estar a la barra i demanar diverses tapes, però si tenen, recomano la de solomillo amb foie que és una delícia al igual que el seu bacallà farcit.
- Sol estar bastant ple així que aconsello anar una mica aviat i agafar lloc.
✅A destacar
- Les seves tapes
- El seu personal
❌A millorar:
- Que només tinguin Mahou i San Miguel de cervesa ja que al meu parer no estan gaire bones i se'm fa una mica escassa l'oferta, però ho compensen amb la seva àmplia oferta de vins.
Sin duda, para nosotros el mejor lugar de tapas de Burgos. Gran variedad y exquisitas. No dudéis en venir a conocerlos y probar su variedad de tapas y, cómo no, esa pulguita de jamón Joselito. ¡Os va a encantar!
Recomendado en la Guía Michelín, con toda la justicia. Comida elaborada a la brasa en buena parte de sus platos, con un buen producto. Dos ambientes, el comedor del restaurante, y la sala de la barra, siendo este último más ruidoso, AUNQUE LA CARTA SEA IGUAL. Servicio impecable, pese a la presión del gran número de comensales, profesionales, amables... y SINCEROS; solicitamos un vino de su bodega y nos reconocieron que lo estaban reservando para unos clientes especiales, lo que es de agradecer, máxime si eres un enamorado de los caldos. Respecto a la bodega, una pequeña joya... con esto lo decimos todo.
Precios ajustados, que variarán mucho según el vino que solicitemos. Un referente de la gastronomía de Burgos, con todas las de la ley.
¡Sin lugar a dudas, espectacular! ¡El servicio fue de primera! Nos atendió una jovencita muy despierta, atenta y rápida, todo un placer. ¡Regresamos al día siguiente y nos atendió una señora un poco borde en sus respuestas, pero no va a empañar las cinco estrellas que le doy gracias a la eficiencia espectacular de la primera chica!
La comida estaba deliciosa, especialmente la cecina con foie. Todos los platos estaban buenísimos, ¡especialmente los pinchos que aparecían en las fotos!
El ambiente era muy local y atractivo. ¡Una experiencia increíble!
Un local de referencia en Burgos, tanto para disfrutar de unas tapas como para deleitarse con una excelente comida. Suele estar muy concurrido, así que es recomendable hacer una reserva si quieres comer allí. El ambiente es excelente, el servicio es atento y profesional, y la comida es deliciosa. Para mí, La Favorita siempre es una elección acertada.
Un buen rincón tanto para tapear como para comer. Tiene un repertorio estupendo de tapas, todas con una pinta espectacular, elaboradas con esmero y deliciosas. El ambiente es muy acogedor, te sientes como en casa. Si vuelvo por Burgos, sin duda volveré a este sitio.
Increíble, no hay palabras para describir la deliciosa comida. Personalmente, no suelo ser fan de la morcilla, pero en este caso la recomendaría sin duda alguna.
Mi pareja y yo queríamos invitar a mis suegros a comer en un restaurante en condiciones, de recomendación Michelin y me topé con La Favorita, ¡qué gran acierto! La tabla de embutidos con su pan cristal y tomate 🍅 es exquisita. El segundo plato de dorada está para morirse, ¡para 4 personas es perfecto y no te arrepentirás! Mi suegro pidió carrilleras que según él eran como mantequilla de lo suaves y sabrosas que estaban. En cambio, mi pareja pidió lengua y no fue un gran acierto porque estaba demasiado salada. Los postres, fenomenales todos. Volveríamos de nuevo sin dudarlo.
Fantástico bar de tapas en el corazón de Burgos. He probado un poco de todo y me ha encantado sobre todo la tapa de anchoas, la presa, el rabo de buey y la torrija. Todo riquísimo. Destaco especialmente a la camarera. Ha sido muy atenta y se ha portado fenomenal con nosotros en todo momento. Un 10 para ella.
Buen trato, camareros atentos y comida muy rica en general todo. Comimos chuletón a 60 el kilo si no recuerdo mal, revuelto de hongos y panceta, rabo de toro que era muy sabroso y ración más que aceptable y carrilleras de ternera muy ricas también. Como postre destacar la tarta de whisky casera.
Visita obligada cuando vamos a Burgos.
Buenas tapas y montaditos, especial mención al chuletón, riquísimo, así como la pulga de solomillo y foie.
El local es un poco complicado en horas punta, llegamos a comernos el chuletón en la barra, pero valió la pena.
Tienen también buen jamón, buenos vinos, parada obligatoria en la ruta de tapeo por Burgos.
En cuanto al servicio, lo califico como bajo, no por los camareros, sino porque son insuficientes en las horas de más afluencia, puede llegar a ser estresante pedir, por lo demás, cinco estrellas.
Está situado en un de los sitios más emblemáticos del centro histórico de Burgos, con la particularidad de formar parte de la ruta del Camino de Santiago. Suele estar a tope, así que es conveniente reservar mesa con antelación.
Nosotros nos sentamos en la terraza en pleno agosto y estuvimos de maravilla. Probamos unas croquetas de jamón Joselito, unos canutillos de cecina con micuit, morcilla de Burgos a la brasa, una tabla de queso y una copa de helado con frutos rojos. ¡La morcilla era gigante y sabrosísima!
Muy recomendable por la calidad de la comida y los precios, además la camarera que nos atendió fue superatenta y nos aconsejó fenomenal, así que otro punto a su favor. Las raciones son generosas, casi no nos podíamos levantar de la mesa.
Después de estar de tapeo por los alrededores, entramos a este local a por "la última". Y se convirtieron en 5, más el postre. Todo riquísimo. A destacar la pulguita con un jamón de 10 y la torrija de pan brioche con helado, se me cae la baba solo de recordarla.
Especial mención a Manoli, toda una máquina en lo suyo.
Volveremos sin duda.
No acostumbro a dejar malas críticas, la verdad, pero salí muy descontenta por el trato del personal, me hablaron bastante mal y nos explicaron de muy mala gana las cosas, la comida estaba buena pero el precio excesivo. No lo puedo recomendar ya que las 2 camareras que nos atendieron rozaron la mala educación. Nos faltó poco para dejar las tapas en la barra e irnos. No volveremos, es más, la persona que nos la recomendó (que es de Burgos) tampoco regresará. Había muy mal rollo entre ellos, se salva un chico joven que fue atento y amable, nos hizo los cafés que habíamos pedido 20 minutos antes, vamos que nuestra camarera se olvidó de nosotros.
No sabíamos dónde ir a comer y descubrimos esta taberna. No estuvo mal, pero las setas no estaban bien... sabían un poco arenosas la verdad tuvimos que devolverlas, excepto por eso los otros platos estaban ricos, buena cantidad, el Ribera buenísimo y los camareros muy simpáticos, el lugar limpio, había espacio, estuvo adecuado.
Hemos estado uns días en Burgos, la caminata ha sido impresionante, y con tanto paseo a uno le entra mucha hambre, estuvimos buscando sitios para picar o comer, al estar varios días hemos probado varios sitios, sin embargo intentamos entrar en La Favorita y nos fue imposible en dos ocasiones, incluso llamamos para reservar mesa y estaba lleno, pero la última noche que nos quedaba antes de irnos, hicimos el último intento y conseguimos entrar y conseguir mesa. Nos encantó, tienes un montón de tipos de tapas y está todo tan rico que te dan ganas de probar uno de cada cosa, pero lo mejor fue el trato de las camareras ya que fue excelente, sobre todo una chica súper amable y que nos lo hizo todo más fácil, no recuerdo el nombre pero era morena con el pelo corto y con gafas y me gustaría que lo supiera porque es por esta gente por lo que da gusto ir a los sitios.
Muchas gracias por el trato y por la comida que es excelente. Saludos de un Valenciano.
Estuvimos en Burgos durante 3 días y los 3 visitamos La Favorita. Pasar por aquí es imprescindible si estás de tapas por Burgos. Los canutillos de cecina con micuit y el solomillo con foie son imprescindibles. El pincho de gamba, bacon y queso gratinado fue todo un hallazgo.
Todo estaba delicioso, te atienden rápidamente aunque haya mucha gente (lo cual suele ser lo normal) y son muy amables.
¡Se come fenomenal, todo buenísimo y mucha variedad, difícil la elección de platos por la pinta que tiene todo! Los huevos a la sartén están riquísimos y la presa a la brasa es increíble. Yo lo recomiendo si pasas por Burgos, ¡no te arrepentirás!